Dos menores vecinos de Vilanova de Arousa han sido condenados a realizar tareas socioeducativas durante cinco y cuatro meses respectivamente como autores de sendos delitos de hurto y conducción sin licencia que cometieron en febrero de 2015 cuando, tras hacerse con un vehículo que no era de su propiedad, huyeron de la Guardia Civil de forma temeraria y acabaron empotrándose contra un muro. En el incidente se vieron también implicados un tercer menor, que ha sido absuelto, y otro vilanovés mayor de edad que no fue parte en el procedimiento de menores. La Audiencia Provincial acaba de ratificar el fallo anterior del Juzgado de Menores número 1 de Pontevedra, sin que haya la posibilidad de interponer más recursos.

Según la sentencia firme, los dos menores condenados, puestos de común acuerdo, sustrajeron un coche Peugeot 307 de un garaje de Vilanova, empujándolo hacia el exterior sin hacer ruido para no ser descubiertos. Después lo pusieron en marcha con las llaves que el propietario tenía guardadas en un armario de su vivienda. Uno de los menores se puso al volante, el otro como copiloto y recogieron con posterioridad a una persona mayor de edad y al tercer menor.

Horas después fueron observados por una patrulla de la Guardia Civil en la carretera PO-549 a su paso por el lugar de Caleiro. Los agentes, al percibir la comisión de una infracción vial, dieron el alto al vehículo robado, que inició entonces una fuga a gran velocidad, perseguido con el coche oficial con las luces de emergencia encendidas. Los jóvenes no se detuvieron ni obedecieron las órdenes de la Guardia Civil hasta que sufrieron una salida de vía y chocaron contra el muro de una bodega. Tras el impacto, los cuatro ocupantes del turismo salieron corriendo y haciendo caso omiso a las voces de alto de los agentes que, finalmente, consiguieron alcanzar a uno de los menores, el que ha sido absuelto, quien les manifestó de forma reiterada que "yo no conducía".

Los daños en el vehículo fueron indemnizados a su propietario por una compañía aseguradora en la cantidad de 3.940 euros. Los desperfectos en el muro, que sumaron 1.425 euros, fueron abonados por el Consorcio de Compensación de Seguros. A los dos jóvenes que se apropiaron del coche robado se les imponen penas de cuatro y cinco meses de tareas socioeducativas como autores de delitos de hurto y conducción sin licencia. El Ministerio Fiscal presentó recurso contra la sentencia inicial alegando un error en la valoración de la prueba que fue desestimado por la Audiencia al "no indicar en qué consiste el error o inexactitud, sin que conste que el relato de hechos sea oscuro, impreciso, dubitativo, ininteligible, incongruente o contradictorio en sí mismo".