El portavoz del PP de Cambados, Luis Aragunde, reitera su convencimiento de que un supermercado en la plaza de abastos sería positivo. En el último pleno expuso su temor a que con la eventual transmisión de los puestos una empresa pudiese hacerse con el control de varios de ellos, ejerciendo de ese modo una competencia desleal sobre los vendedores autónomos. El portavoz del cuatripartito, Xurxo Charlín, le replicó que su preocupación no era sincera, pues siendo alcalde impulsó en el proyecto de la nueva plaza la instalación de un supermercado.
Luis Aragunde apuntó ayer que "no son incompatibles los dos planteamientos", puesto que alega que el supermercado no vendería ni pescado, ni carne ni verduras, "con lo cual no le haría competencia a las placeras". Sí apunta que hay dos vendedoras de ultramarinos, pero asegura que las empresas con las que habló él en su día le transmitieron "que se buscaría una solución para esas mujeres, planteando incluso la posibilidad de contratarlas". Considera que el supermercado atraería más clientes a la plaza, "porque hoy en día la demanda se concentra en centros donde puedas abastecerte de todo tipo de productos".
