El merchandising de la Festa da Auga causó "furor" en la mañana de ayer en la Praza de Galicia, donde la comisión organizadora puso a la venta unas 40 mochilas, 70 bolsas impermeables y riñoneras -novedad este año- y 250 camisetas con la imagen de San Roque que aparece en el cartel publicitario de esta edición, creación del diseñador gráfico David Lage, que trabaja para marcas como Rei Zentolo y Caramuxo. Muestra una imagen "moderna" de San Roque peregrinando, con bañador, chanclas y pistola de agua, listo para sumarse a la fiesta. "La imagen publicitaria ya se hizo pública hace mucho tiempo y gustó", explican miembros de la organización. Y a ello achacan el "furor" de ayer, cuando prácticamente agotaron existencias en poco más de dos horas y media. "Nos lo quitan de las manos", decían en plena venta.
En cuanto a la fiesta, el día 16 a partir de las doce de la mañana, Carlos Guerrero Jr., uno de los integrantes de la comisión, aboga por recuperar el "sentido tradicional" de la misma, los calderos de agua que se tiran desde ventanas y balcones y la "picardía" a la hora de mojar, en lugar de centrar tanto el evento en los vehículos de Protección Civil que lanzan chorros desde las bocas de incendios. Además, animan a las nuevas generaciones, sean católicos o no, a que acudan a la subida de San Roque en procesión a la capilla, "un momento emocionante" en el que no falta desde hace unos años el lanzamiento de flores, pétalos y confeti de colores.
Aunque la Festa da Auga nació de forma espontánea a principios de los años 80, Guerrero remarca que en 2016 se cumplen 245 años desde que "se oficializó y regularizó" la celebración más multitudinaria de Vilagarcía, con el distintivo de Interés Turístico Nacional. Anuncia "sorpresas" en el pregón que a mediodía marcará el arranque de las mojaduras.'
Además de los habituales consejos de seguridad -como llevar calzado cómodo y cerrado, evitar los recipientes de cristal que puedan romperse, llevar teléfonos móviles o billetes y no coger agua acumulado en el suelo-, la asociación "Auga que non has de beber" pide "respeto" en la zona seca y que "no tiren agua durante la subida del santo". Abogan por la celebración familiar, a la que puedan acudir desde abuelos hasta nietos y, a partir de ahí, diversión y alegría. "Quienes quieran animar pueden llevar percusión y que todos se remojen con agua fresca".
Aunque al coincidir entre semana no será de las ediciones más masificadas de la Festa da Auga, habrá un dispositivo especial de seguridad durante el día 16 de agosto y la madrugada previa. La Policía Nacional triplicará sus efectivos en la ciudad, la Policía Local duplicará guardias y turnos y la Guardia Civil de Tráfico hará controles de alcoholemia en los accesos y salidas de la ciudad. En la Praza da Peixería habrá un hospital de campaña para atender incidencias.
