La veintena de voluntarios que participaron en el campo de trabajo "Natureza e patrimonio xunto ao mar", finalizaron ayer su estancia en Vilanova de Arousa, tras doce intensas jornadas en las que han colaborado en un proyecto comunitario centrado en recuperar diferentes espacios naturales del municipio, así como en conocer todo el entorno. En este campo de trabajo, el primero que se organiza en Vilanova, fueron invitados jóvenes de cinco países: China, Turquía, Francia, Italia y España. Todos ellos trabajaron en la mejora del entorno de los molinos de Currás, que se van a recuperar con un taller de empleo y en el acondicionamiento de espacios en la playa de As Patiñas y Monte Lobeira.
La experiencia fue valorada de forma muy positiva por todos estos jóvenes, que han podido conocer, de primera mano, la forma de vida en la ría de Arousa mientras participaban en un programa comunitario de voluntariado.
