El Plan Nacional sobre Drogas parece haberse cansado de perder dinero con los locales comerciales de "Pelopincho", e inició ayer mismo un nuevo proceso de venta directa de los que el narco ribeirense tuvo en su día en el Centro Comercial Arousa, en Vilagarcía. Este proceso destaca con respecto a los anteriores en que ya no se trata de una subasta, sino de una enajenación directa, y por el precio mínimo de los inmuebles. Y es que en esta ocasión, el importe mínimo de la oferta ha de ser de 60.000 euros, un 80 por ciento menos que en diciembre de 2014. En aquel entonces, el Plan Nacional sobre Drogas sacó a subasta por primera vez las tiendas, y en aquella ocasión el importe de licitación mínimo era de 277.000 euros.

Este departamento dependiente del Ministerio de Sanidad recibe a menudo bienes inmuebles, vehículos, embarcaciones o joyas embargados por la Justicia a traficantes de estupefacientes o condenados por blanqueo de capitales. La misión del Plan Nacional sobre Drogas (PNSD) consiste entonces en encontrarles comprador, de modo que el dinero se reinvierta posteriormente en programas de apoyo a los drogodependientes.

Pero no siempre es posible vender esos bienes. El hecho de que a menudo pasen años desde la intervención judicial efectiva hasta su salida a subasta pública motiva que sufran un acusado deterioro por robos, destrozos o el paso del tiempo sin uso, lo cual los hace menos atractivos. Además, también pesa en el caso de ciertos bienes el estigma de su procedencia, lo que desanima a muchos a pujar por ellos. Y la crisis económica y el consecuente descenso del consumo parecen influir también en la enajenación de los comercios.

Eso es lo que parece estar ocurriendo con algunos de los inmuebles embargados en su día a José Antonio Pouso Rivas, "Pelopincho", de quien no se sabe nada desde hace años, hasta el extremo de que en los cuerpos y fuerzas de seguridad que investigan el narcotráfico tienen la convicción casi total de que lo asesinaron en un ajuste de cuentas. Algunos de los bienes de "Pelopincho" que no han despertado el interés de comprador alguno hasta la fecha son los cinco locales que tiene en la segunda planta del Centro Comercial Arousa. Ya han ido a subasta en al menos tres ocasiones, pero siempre quedaron desiertos. El PNSD lo intenta ahora de nuevo.

Presentación de ofertas

Las personas o entidades interesadas en los locales comerciales pueden presentar sus ofertas económicas ante el Plan sobre Drogas desde primera hora de la mañana de ayer lunes, y hasta las 14 horas del lunes próximo, día 20. Además, el PNSD ofrece a los interesados la posibilidad de visitar los locales para conocer su estado actual. Para ello, tienen que pedir cita en los teléfonos 91 822 6126 o 639 514 470. El plazo para visitar los inmuebles termina este viernes.

La venta de estos locales fue autorizada el pasado 6 de junio en la Mesa de Coordinación de Adjudicaciones del Plan sobre Drogas, y si hay más de un ofertante se los llevará aquella persona o entidad que presente la puja más alta (siempre por encima del mínimo, establecido en 60.000 euros). En caso de empate entre dos o más ofertas, se declarará vencedora del procedimiento aquella que haya llegado antes al Plan sobre Drogas. Asimismo, el adjudicatario final tendrá que correr con gastos como el pago del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) del año en curso o de escriturar los locales ante notario.

Pouso Rivas y las personas de su entorno directo adquirieron en su día cinco locales comerciales en el ala derecha de la segunda planta del Centro Comercial Arousa -tomando como referencia la entrada al edificio-, en los que tuvieron varios negocios, fundamentalmente de venta de ropa. Actualmente, estos están tapiados con un muro de madera blanca.

En total, estos establecimientos cerca de 200 metros cuadrados útiles -están divididos en cinco locales prácticamente iguales-, y el lote incluye también una de las plazas de garaje que se encuentran en el exterior del centro comercial, en la parte trasera de las tiendas.

La oferta aprobada en la Mesa de Coordinación de Adjudicaciones del Plan sobre Drogas es muy agresiva habida cuenta de que hace tan solo un mes que quedó desierto otro proceso para vender estos inmuebles. Pero en aquella ocasión los precios eran mucho más elevados. En el proceso de venta directa de mayo, el PNSD repartió las cinco propiedades en cuatro lotes distintos. Uno de ellos constaba de dos locales y la plaza de garaje, y aunque los peritos los tasaron en 106.000 euros, se admitían ofertas desde 74.200.

El segundo lote constaba de un único bien, tasado en 52.600 euros, y el importe mínimo de la oferta era de 36.800 euros. Finalmente, el tercer lote constaba de nuevo de dos inmuebles -cada uno de los cinco tiene una referencia catastral distinta-, y aunque el valor de tasación ascendía a 105.000 euros, se admitían ofertas desde 73.360 euros. Esto significa que el Plan sobre Drogas admite ahora ofertas por cinco locales desde 60.000 euros, cuando hace apenas mes y medio haría falta disponer de 185.000.

En ese proceso de venta directa de esta primavera, que está pendiente de resolver por los administrativos, también se ofrecía un local hostelero que "Pelopincho" tuvo en su día en Bemil (Caldas de Reis), y que acogió entre otros negocios el club "Fuego Latino", o una vivienda de protección oficial comprada en Pontecesures a nombre de Terezinha de Jesús Carvalho -implicada en la trama de blanqueo del narco ribeirense- y que salía por un precio mínimo de 47.600 euros.

También se vendía el chalé de la calle Lera de Vilanova que se le embargó al narco Guillermo Maneiro y a su esposa. Tasada en 159.100 euros, se admitían ofertas a partir de 111.370. Aunque en este caso la "ganga" no es tan significativa. Y es que fue subasta a finales de 2015 por un precio de salida de 159.000 euros, pero en la segunda licitación -si quedaba desierta la primera- ya se pedían 111.400, una cifra muy similar a la del último procedimiento.

De lo que una vez más no hay novedades es de la casona de Laureano Oubiña situada en A Laxe (Vilagarcía). El Plan sobre Drogas no la ha sacado formalmente a subasta ni una sola vez. El hecho de que esté sin terminar por dentro y de que comparta servicios con las viviendas de varios familiares del narco la convierten en poco atractiva en el mercado. El PNSD dijo que valoraría cederla a organizaciones de apoyo a toxicómanos, pero la propuesta fue recibida por éstas con frialdad.