Representantes del grupo municipal del PP se reunieron el viernes con José Manuel Cores Tourís, delegado territorial de la Xunta, para solicitarle la implicación del gobierno autonómico en la creación y mantenimiento del Servicio Municipal de Emergencias. Los conservadores, que apelan también a la colaboración de la Diputación, quieren que se reedite el convenio por el que funcionó en su momento el Grupo Municipal de Intervención Rápida (Grumir), tratando de conseguir fondos públicos que ayuden a desarrollar el servicio de la mejor manera posible.

Dicen en el PP que tomaron la decisión de acudir directamente a la Xunta en busca de ayuda ante la "ineficacia" del alcalde, el socialista José Antonio Cacabelos. En este sentido, lamentan que el gobierno local "no se da prisa en aprobar el presupuesto municipal ni en solventar los problemas" que se derivan de la carencia del documento económico, entre ellos el pago a los profesionales de Emergencias.

En el PP están convencidos de que "la permanente amenaza del alcalde sobre la imposibilidad de abonar los salarios a los miembros de este servicio es una clara maniobra política y también un modo de utilizar a los trabajadores para tratar de ablandar la conciencia de algún miembro de la corporación y conseguir la aprobación del presupuesto". Pero "nosotros no nos dejamos engañar, y si algo de lo dicho sucede será por la dejadez e incompetencia del gobierno local", terminan.