Cinco años, ese es el tiempo que llevan sin poder disfrutar de las instalaciones de la casa da cultura de Armenteira, en el Concello de Meis, los vecinos del lugar. Lo que iba a ser una situación provisional se ha convertido en una situación permanente en el tiempo, algo que los vecinos no están dispuestos a consentir, sobre todo si se tiene en cuenta que el inmueble se asienta sobre terrenos cedidos por ellos y que parte de las obras del edificio fueron acometidas con dinero de la comunidad de montes.

Durante todo ese tiempo, se han visto obligados a utilizar las dependencias del colegio público de Armenteira para las reuniones, un espacio que "está dedicado a la enseñanza y no para ser el escenario de actividades para mayores como pueden ser pilates, clases de informática o zumba". Además, las dependencias del colegio también se encuentran en un estado bastante deplorable, como demuestra el hecho de que parte del tejado necesita con urgencia una reparación tras más de treinta años de existencia, lo que ha llevado a vallar varias zonas de las inmediaciones del centro "para evitar posibles desprendimientos".

Esta situación es la que le van a poner encima de la mesa al regidor de Meis, José Luis Pérez, en unja reunión que van a mantener con él a partir de las 20,30 horas. La reunión, que debería ser en la casa da cultura, tendrá que ser en las dependencias del colegio al no poder usarse el primero de los inmuebles "porque está destinado, en estos momentos, a uso exclusivo de los peregrinos".

El proyecto de remodelación del albergue contemplaba destinar uno de los pisos de la casa da cultura a este servicio, mientras el otro estaría destinado a las actividades vecinales, pero la lentitud de las obras hace que los habitantes de Armenteira no cuenten con ese lugar para celebrar sus reuniones o los diferentes actos que diseñen. Además, en el seno de los vecinos se han generado numerosas dudas sobre el funcionamiento y la gestión del albergue de peregrinos que esperan que el alcalde aclare en esta reunión.

"Armenteira, por el Monasterio, es una de las parroquias que más dinero recibe de otros organismos, pero ese dinero solo se gasta en la Ruta da Pedra e da Auga, mientras que los vecinos continuamos sin disponer de muchos servicios básicos", explican. Insisten en que "lo único que queremos es que se devuelva aquello que es nuestro y de lo que no podemos disfrutar desde hace varios años".