Ahora que están a punto de comenzar las obras de construcción del puerto deportivo de A Toxa quizás sea interesante recordar que el club náutico que promueve la obra garantiza que "no va a haber un impacto mayor sobre el paisaje que el existente actualmente" a causa de una obsoleto muelle "con una estructura de soporte que se mantiene elevada en invierno, la cual será retirada para instalar pilotes aislados para la cimentación".

Lo cierto es que la actual estructura portuaria de la isla meca presenta un avanzado deterioro y "se ha convertido en potencialmente muy peligrosa para usuarios y trabajadores", según el CNIT.

De este modo tratan de explicar que las condiciones de seguridad van a mejorar notablemente -no solo la funcionalidad e imagen del puerto-, a lo que añaden que tampoco va a verse afectada la navegación porque "se mantiene un canal de más de 25 metros de ancho con un calado limitante de un metro de profundidad en algunas zonas, medido sobre el nivel de bajamar máxima, y con mayor ancho y calado para otras condiciones de marea".

Es de reseñar que las instalaciones propuestas se desarrollarán íntegramente en los límites de la actual zona de servicio portuario de A Toxa, consolidadas desde los años ochenta.