Iria Parada es una joven grovense muy conocida en la localidad que triunfa lejos de las fronteras de O Bao, como gusta decir en su pueblo natal. Hace tiempo que esta actriz, en cuyo curriculum sobresale el haber trabajado con un director tan conocido y valorado como Almodóvar, se estableció hace ya un tiempo en Madrid para seguir avanzando en su proceso de formación y abrirse camino artístico mediante diversos proyectos, sobre todo fotográficos y publicitarios.
Pero su potencial como actriz y el hecho de que sea una mujer incansable que mamó teatro desde niña y que lleva la escenificación en la sangre la han llevado a formar su propia compañía teatral, "Musas Anónimas".
Esta formación "de sangre gallega", tal y como presumen la propia Iria Parada y su compañera de tablas, reparto y sueños, la ferrolana Catuxa Leira, estrenó anoche su primera gran obra teatral, titulada "Opening".
Es un trabajo de Dani Llull -nacido en A Coruña aunque asentado en Madrid- que consiguieron representar en la sala Taranbana de la capital española -un popular local de teatro y conciertos ubicado en Carabanchel- gracias a la colaboración de la formación madrileña "Fulminati Teatro".
Junto a la dirección y dramaturgia de Daniel Llull o al papel que desempeñan las citadas Iria Parada y Catuxa Leira, hay que destacar que el vestuario de esta obra es de Sigrid Blanco y Julia Mellet Sánchez, la escenografía corre a cargo de Irina Pedroche, Andrés López y "Fulminati Teatro", el diseño de iluminación es cosa de Gustavo Recuero, del espacio sonoro se encarga otro buen conocedor de O Grove, como es Andoni Arcos, y tanto el diseño gráfico como la producción pertenecen a "Musas Anónimas".
Esta representación teatral cuenta la historia de dos mujeres "encerradas en una habitación con el único propósito de ensayar un espectáculo", obligadas a seguir unas instrucciones "dadas por alguien que, en algún momento, abrirá la puerta para observar el resultado".
Durante ese proceso creativo dichas mujeres, interpretadas por Iria Parada y Catuxa Leira, "descubrirán quiénes son" y la razón de su reclusión en aquel lugar, al igual que comprenderán que "no siempre hay que respetar las normas para poder salir de nuestro encierro".
Se trata, como queda dicho, de la primera gran apuesta teatral de Iria Parada en Madrid, pero desde luego no será su último proyecto de la grovense, pues nadie parece dudar de que su trayectoria y su capacidad para la dramatización le seguirán abriendo muchas puertas en la capital.
Forjada como actriz al abrigo de la asociación cultural Roza do Pedrol, en San Vicente de O Grove, Iria Parada -que incluso impartió clases de teatro en su parroquia natal- se ha convertido por méritos propios en toda una artista y en una de las principales representantes de la cultura de la localidad que la vio crecer.
De ahí que ayer, a pesar de la distancia, la joven actriz se sintiera arropada por sus seres queridos y sus convecinos grovenses, quienes le enviaron su ánimo y apoyo a través de multitud de llamadas telefónicas y mensajes en las redes sociales, donde también se aprecia claramente que en el municipio meco, y más concretamente en San Vicente, se sienten muy orgullosos de su ya popular actriz.
