Manuel Cachaldora señala que "las obras van bien, a buen ritmo, y eso que tuvimos mal tiempo". De hecho, ya está levantada la nueva torre de piedra, y se han colocado las campanas y la cruz. La previsión es que los trabajos estuviesen concluidos a finales de mes, y el religioso anuncia que en ese momento se convocará a los vecinos para celebrarlo con una pequeña fiesta de confraternidad.

El antiguo campanario de la iglesia de Sisán fue derribado hace unos décadas por la caída de un rayo. Se reformó con ladrillos y cemento, pero la calidad de estos materiales no permitió que aguantase demasiado, y hacía ya tiempo que la torre daba problemas, de ahí que la parroquia iniciase los trámites con Patrimonio para demolerlo y levantar uno nuevo hecho de piedra.

Las obras han obligado a los vecinos a acceder al templo por una puerta lateral, y el sonido de las campanas ha sido sustituido por una grabación.