Alberto Figueiro Romay completó ayer los primeros 40 kilómetros de la odisea que le llevará a concluir en Barcelona toda esas cantidades ingentes de buenos deseos que el grovense tiene en relación a los enfermos de cáncer. Una vez decidida la suspensión del Lúatlon popular en O Grove, nadie quitará a Alberto la posibilidad de homenajear a su hermano con una acción de héroe que busca la mayor repercusión en forma de donaciones para luchar contra esa lacra que también se llevó a Luis Miguel hace ahora tres años.

Además de sus escuderos Félix Méndez y Manuel Casal, también su amigo José Miguel Cao quiso acompañar a Alberto en la carrera a pie que le hizo partir de O Grove para concluir la primera de las once etapas en Caldas de Reis. Allí, después de cuarenta kilómetros, y con la enorme satisfacción que le reporta la causa, el grovense reconocía que "me encontré bastante bien. Fueron tres horas y media de carrera a buen ritmo y para abrir boca estuvo perfecto".

Para hoy su hoja de ruta marca otros cuarenta kilómetros con salida en Caldas y parada en Silleda también a pie. Ya el jueves será el turno de la primera de las siete etapas en bicicleta con salida también en Silleda para llegar hasta Ponferrada después de 182 kilómetros. Precisamente en la localidad dezana se espera su llegada con cierta expectación a tenor de la creciente popularidad que Alberto ha cobrado en los dos últimos años en los que, a base de puro esfuerzo, ya recaudó la friolera de 23.000 euros para la Asociación Española Contra el Cáncer.

Tras coronar su primera etapa en las inmediaciones del ayuntamiento caldense, la expedición grovense se desplazó a Santiago para fijar su cuartel general. Después de recuperar fuerzas, tocó turno de masaje para preparar la etapa que hoy le espera. Un trazado mucho más exigente y que partirá exactamente desde el mismo punto geográfico que ayer se convirtió en zona de meta.

El primer día de esta excelsa acción humanitaria se completó en el Multiusos Fontes do Sar donde el Río Natura Monbus Obradoiro homenajeó al grovense con una recepción al término de su entrenamiento. El equipo de Liga Endesa ACB, con Moncho Fernández a la cabeza, se interesaron por la ruta que tiene por delante, así como por la bicicleta en la que completará las etapas. Las muestras de apoyo sirvieron para reponer el bidón de energía vital para tal heroicidad.