La situación de la carrilexa es distinta a la de las demás agrupaciones de Arousa sur. Y es que mientras estas terminan un año igual o mejor que el anterior, la de Carril lleva "tres años sin levantar cabeza", lamenta una de sus directivas. Si bien en diciembre salvaron los muebles gracias a las Navidades, "mejor que las anteriores" -precisa-, el resto del año "trabajamos muy poco". "En verano, en la Compostela murió una parte de la producción y tuvimos que regenerar y sembrar toda la playa", sostiene la mariscadora. La almeja creció y, aunque con la talla "justa", pudo cotizarse para la campaña navideña.