El Partido Popular ha obtenido la confianza de los vilagarcianos en más de la mitad de las 55 mesas electorales de la ciudad, una cuota inferior a la alcanzada en los comicios generales de 2011, cuando la gaviota registró un techo histórico por encima de los 10.000 votos. La siguiente formación con más votantes en este 20-D, la emergente En Marea, ha obtenido el respaldo mayoritario de los vecinos en un tercio de las mesas, es decir, un total de 18, que se reparten por la geografía vilagarciana, o lo que es lo mismo: no hay una clara diferenciación del voto urbano y del rural.
Prueba de ello es que la confluencia de Podemos, Esquerda Unida y Anova ha arrasado en A Escardia (solo en una mesa cosecha más sufragios el PP, pero esos 4 votos de diferencia son de sobra compensados por los resultados de En Marea en las otras tres), O Piñeiriño (un barrio obrero y joven), Faxilde (en pleno rural vilagarciano) y Arealonga. En estas cuatro zonas En Marea ha sido más votada que el Partido Popular, la primera fuerza en el conjunto de Vilagarcía.
Aparte de estos barrios, la que se define como la candidatura del izquierdas del cambio también ha vencido en algunas mesas sueltas, como en una de San Roque, otra en Fexdega, en A Lomba (por un voto al PP) y en el instituto Cotarelo Valledor, en Vilaxoán.
Pese a la irrupción de En Marea, el PP continúa manteniendo su hegemonía en el centro de Vilagarcía, con cinco de las siete mesas del Auditorio, y con la de la casa de la cultura de Rey Daviña.
En el Anexo A Lomba los conservadores se llevan la palma, así como en las localidades marineras de Carril y Vilaxoán, donde la gaviota gana en todas las mesas.
En las zonas eminentemente rurales, como Castroagudín, Aralde, Cornazo, Cea, Rubiáns, y en menor medida Trabanca Badiña, Sardiñeira y Sobradelo, los populares obtienen unas victorias más holgadas. El caso más significativo es el de A Laxe, la única mesa de las 55 existentes en este 20-D que rebasa los 200 votos conservadores. Le siguen, muy lejos, los 97 de En Marea y los 85 del PSOE.
El PSOE conserva Guillán
Por su parte, el Partido Socialista debe conformarse con liderar los resultados en su feudo de Guillán, con 154 sufragios, frente a los 134 de la gaviota y los 103 de En Marea. La formación del puño y la rosa solo gana en esa mesa y en una de Bamio, y pierden A Torre y San Roque, dos barrios que hasta hace poco solían dar alegrías a los socialistas en cada cita electoral.
En lo que respecta a la cuarta fuerza en Vilagarcía, Ciudadanos, supera en la inmensa mayoría de las mesas a Nós-Candidatura Galega (integrada por el BNG), a excepción de las dos de Vilaxoán, donde el voto nacionalista resiste y rebasa al de la formación de Albert Rivera.
