El joven detenido el viernes pasado tras participar supuestamente en una compra-venta fallida de droga y en una persecución por carretera quedó en libertad provisional tras prestar declaración en la mañana de ayer en los juzgados de Vilagarcía. La juez responsable del caso le atribuye cuatro presuntos delitos: robo con violencia, falsificación de moneda, tenencia ilícita de armas y detención ilegal.
El hombre es un joven ciudadano sudamericano, con domicilio en Ourense, y la Guardia Civil le detuvo el viernes por la tarde después de que su coche se estrellase en A Pantrigueira (Vilanova), supuestamente porque escapaba de otro automóvil, conducido por un vecino de A Illa. En la persecución se vio implicado un tercer vehículo, ajeno a la presunta compra-venta de droga, y en el que viajaba una mujer isleña que se encontró de frente con los dos coches de la persecución y que resultó herida al echarse a la cuneta.
La hipótesis que se maneja es que el detenido y otra persona que no ha sido identificada por ahora se desplazaron a A Illa para comprar una partida de droga al isleño que presuntamente les persiguió con el coche. Se habrían citado sobre las 16 horas en el entorno del centro de salud, pero parece ser que las cosas no salieron bien, hasta el extremo de que el arrestado y su compañero habrían intentado pagar con dinero falso la droga y, tras comprobar que esto no salía bien, robarla dejando encerrado al isleño.
Fuese lo que fuese lo que realmente ocurrió, el detenido y su compañero habrían salido a toda velocidad en un turismo BMW, y tras ellos el isleño, también al volante de un coche de esta marca, y tras unos cuatro kilómetros de carrera ésta terminó en A Pantrigueira. El detenido huyó a pie, pero regresó posteriormente a la zona, momento en el que fue arrestado por la Guardia Civil, que también encontró una pistola en el compartimento de la puerta del conductor.
También se identificó al vecino de A Illa y de la tercera persona -vista por testigos presenciales del accidente- no se ha vuelto a saber nada, aunque la Guardia Civil está intentando atar cabos para llegar hasta él.
Los hechos generaron preocupación, al producirse a plena luz del día y en una carretera con una elevada densidad de tráfico, como es la que comunica la comarcal PO-549 (Vilagarcía-Cambados) con A Illa.
