| A iniciativa del Club de Remo Mecos, la Festa do Marisco contó en esta edición con un nuevo atractivo. Se trata de un stand de remoergómetro en el que se pueden medir o intuir las capacidades de cualquier persona para la práctica del remo. Cada una de las máquinas allí dispuestas tiene un controlador de distancia y tiempo en el que se puede calibrar la potencia para subirse a una trainera. A tenor de las expectación la idea podría tener continuidad.