La agrupación comarcal de Solidariedade Galicia co Pobo Saharaui celebró una reunión en el Auditorio Municipal de Vilagarcía en la que se abordó el envío de alimentos a los campamentos de refugiados ante la falta de productos de primera necesidad.

La caravana de alimentos al Sáhara saldrá a finales de este mes o en la primera semana de febrero en un contenedor desde el puerto de Vigo. De esta manera se completa la campaña de recogida de alimentos para ayudar al pueblo saharaui que vive en los campamentos de refugiados.

Otro de los asuntos abordados en la reunión del viernes fue el programa "Vacaciones en paz" por el que todos los veranos llegan a Galicia niños procedentes de los campos de refugiados para mantener una convivencia con familias gallegas. Se trata de un programa de respiro para estos niños que el resto del año viven con sus familias en unas condiciones ínfimas. Incluso la presencia de estos menores en el territorio español se aprovecha para que pasen una revisión médica y mejoren su alimentación.

Vacaciones en paz

Para este verano está prevista la llegada de los 327 niños que ya estuvieron en las vacaciones de 2014, más otros 30 nuevos. Por este motivo se hace un llamamiento a las familias de la comarca para que participen en este programa como familias acogedoras.

Los miembros de la agrupación están muy contentos porque el año pasado aumentó de forma importante el número de familias acogedoras, pasando de 4 a 18 y en los últimos días se apuntaron otras dos para participar este año.

La inscripción sigue abierta, por lo que los interesados pueden ponerse en contacto con el delegado de la asociación en O Salnés, Francisco Javier Vidal Tuñas, o con algún miembro de la asociación llamando a los teléfonos 986.262637 o 606723041.

Por otra parte, los miembros de asociación en la comarca de O Salnés participaron ayer en la manifestación celebrada en Santiago de Compostela en solidaridad con el joven activista sahariano Hassanna AAlia, que vino a estudiar, pero no consigue que le den asilo político en España.

El joven fue condenado a cadena perpetua por un juez militar en Marruecos y si regresa irá de por vida a una prisión.

Los manifestantes demandan al Gobierno de España que le otorgue el asilo político para evitar que lo envíen a Marruecos. La agrupación desconoce los motivos del Gobierno español para denegarle la petición.