El portavoz del BNG de Cambados, Víctor Caamaño denuncia que los trabajadores de la piscina municipal están todavía pendientes de cobrar la mensualidad de mayo. El nacionalista se hace eco de las dificultades por las que pasa este servicio debido a los elevados costes de mantenimiento que tiene la instalación por el aislamiento deficiente. Tanto es así que la empresa que tiene la explotación del servicio, Gimnasios Pazos quiso dejarlo, y aceptó continuar cuando el Ayuntamiento se hizo cargo de dichos gastos de energía.

El BNG cambadés indica que la piscina cuenta con unos 400 usuarios, y que la empresa concesionaria da trabajo a 17 personas, la mayoría de ellas de unos 30 años de edad media y vecinos de Cambados. Caamaño dice de ellos que "están pasando por un momento muy complicado y de gran incertidumbre laboral y personal", y reprocha al grupo de gobierno que no recibiese a los representantes sindicales de la plantilla "a pesar de que se lo solicitaron hasta en tres ocasiones".

Así las cosas, el BNG presenta varias preguntas al grupo de gobierno, como si es posible que la piscina cierre a lo largo de este año, cuándo se va a ejecutar el arreglo de la cubierta -prometido en innumerables ocasiones por el PP- o si el Concello aceptaría gestionar directamente el servicio.