El Concello de O Grove quiso promocionar los juegos populares y demostrar que también pueden resultar entretenidos y competitivos. Por esta razón, el campeonato interescolar de este año, que se celebraba ayer en el pabellón de Monte da Vila, cambió el fútbol, baloncesto, balonmano y otras disciplinas mayoritarias o muy conocidas en el colegio, como el brilé, por esos entretenimientos de toda la vida. Y el resultado no pudo haber sido peor.

Estaban invitados a participar los alumnos de cuatro centros de enseñanza, pero sin embargo apenas una decena de jóvenes se acercaron al pabellón de Monte da Vila para competir en este torneo, convirtiéndose así en uno de los fiascos más estrepitosos de los últimos tiempos, después de que, también es cierto, se pusieran en marcha otras muchas propuestas realmente exitosas. Las altas temperaturas registradas ayer, que animaban a ir a la playa en lugar de meterse en un polideportivo, parecen la causa fundamental de este desastre de campeonato interescolar.

Sea como fuere, aquellos que quieran disfrutar de los juegos populares van a tener una nueva oportunidad a lo largo del fin de semana, ya que se instalan entre 120 y 140 en la zona de Beiramar.

En Deportes buscaban ayer "una mayor participación del alumnado", pero parece que ahora habrá que replantear el torneo interescolar del año que viene.