Los bomberos están molestos con la central de emergencias del 112 Galicia porque no les movilizó el sábado, tras la llamada de alerta de una de las mujeres que iban en el helicóptero siniestrado. "El accidente se produjo en un terreno escarpado, muy próximo a una línea de alta tensión, y el helicóptero estaba lleno de combustible, por lo que nos parece una temeridad que no nos hayan movilizado", manifestó ayer un representante sindical de la plantilla. Así las cosas, en las próximas horas mandarán al Consorcio Provincial Contra Incendios -al que pertenecen-, una petición formal de explicaciones, que el Consorcio demandará a su vez a la central del 112.
La alerta se produjo el sábado sobre las 21,45 horas, y el 112 movilizó al Servicio Municipal de Emerxencias de Vilagarcía, que llevó el peso del operativo. De hecho, fueron los miembros de este equipo quienes localizaron el helicóptero en una zona de difícil acceso, abrieron un camino con el quad para el traslado del herido en un colchón de vacío (para evitar una eventual lesión medular), refrigeraron la aeronave para evitar una explosión, y luego se quedaron custodiándola hasta bien entrada la madrugada. Pero los bomberos están molestos, pues creen que algunas de esas funciones les corresponden a ellos, y que por lo tanto el 112 les debería haber llamado.
No es la primera vez que se producen roces por actuaciones de emergencias en Vilagarcía. Tanto es así que en su día llegó a haber una reunión entre las partes para resolver estas fricciones. A este respecto, fuentes municipales de Vilagarcía manifestaron ayer que en aquella reunión se acordó que sería el 112 quien coordinase las actuaciones, con lo que el grupo municipal no habría incumplido ningún acuerdo.
El presidente de este equipo, Francisco Guillán Busto prefirió no hacer declaraciones sobre esta polémica, pero sí quiso destacar y agradecer el trabajo realizado por la unidad y los voluntarios. "Estamos muy contentos porque el engranaje funcionó bien. Hay que tener en cuenta la dificultad de trabajar en esa zona y de noche cerrada". Al día siguiente localizaron más piezas del aparato a 150 metros de distancia.
