Los conductores que estos días circularon por la fachada marítima de Vilaxoán se encontraron con cinco nuevos pasos de peatones elevados en un tramo de menos de 600 metros. El problema es que esta nueva medida en materia de seguridad vial para frenar los excesos de velocidad no está señalizada, ni de forma vertical ni horizontal, es decir, ni con indicaciones que adviertan a los vehículos con antelación de la diferencia de altura en el asfalto ni tampoco con un paso de cebra pintado en el suelo. Solamente se aprecia una mancha negra en la calzada que, en muchos casos, cuando se ve ya es demasiado tarde, pues el vehículo ya ha impactado contra el resalto.
Precisamente el objetivo de estos badenes ubicados en la carreteras de la playa de O Preguntoiro es que los automóviles respeten la velocidad máxima de la zona (limitada a 50 kilómetros por hora) a la vez que se aporta más seguridad a los peatones, pues disponen de más pasos para cruzar. No obstante, antes es necesario terminar las tareas y señalizar correctamente los nuevos badenes que se suceden entre el parque Dona Concha y la empresa Ameixa de Carril.
Hasta ahora en la Rúa do Preguntoiro solamente había un paso elevado, concretamente frente al centro sociocultural de Vilaxoán. Ahora hay otros dos hasta la rotonda y luego otros tres. Por tanto suman seis pasos elevados en O Preguntoiro.
A punto para Semana Santa
De esta forma la administración pone a punto los accesos de la playa con la mirada puesta en la Semana Santa, una época en la que si el tiempo acompaña los turistas se animan a darse el primer baño del año. Así, la mejora de la seguridad vial en O Preguntoiro ya queda lista para el verano, cuando crece el número de visitantes y por tanto el de bañistas.
La playa de O Preguntoiro ondeó en 2012 una Bandera Azul. El año pasado perdió el distintivo debido a la presencia de vertidos, y el sello de calidad fue a parar al arenal de O Campanario, en Bamio.
Por otra parte, el Concello de Vilagarcía ha reanudado los trabajos de pintado de las carreteras gracias a las buenas condiciones meteorológicas. La empresa contratada por Ravella para llevar a cabo las labores reanudó su actividad ayer en la avenida Rodrigo de Mendoza, para continuar, mientras el tiempo lo permita, por otras calles del casco urbano y travesías más importantes de la ciudad.
Los trabajos abarcan repintado de pasos de peatones, líneas de carriles, isletas, marcas de stop, de ceda el paso, ... Dentro de este plan también se incluyen calles fuera del centro muy transitadas como la avenida de Cornazo.
