Los alumnos del colegio vilagarciano de O Piñeiriño disfrutaron ayer de una jornada como radioaficionados gracias a una iniciativa de la unión española de esta especialidad (URE). Su vocal, el vilagarciano Miguel Ángel Ruano, y su compañero Javier Rodríguez Paz, también de la localidad arousana, fueron los encargados de enseñar a los jóvenes el funcionamiento de la radio. Gracias a ello pudieron contactar con otros colegios de España adscritos al proyecto e intercambiar mensajes de paz.

"Los niños preguntan para qué utilizamos la radio habiendo internet, pero al ver cómo funciona se enganchan", comenta Miguel Ruano, que califica la comunicación por este medio como "imprevisible y más satisfactoria e interactiva que la que ofrecen otros sistemas".

Ayer mismo, los niños de O Piñeiriño localizaron casualmente una señal de Hungría y pudieron hablar con el aficionado que la enviaba. "Fue muy amable e incluso habló con los niños en español. Es lo que tiene ser radioaficionado, que aprendes mucho de otras leguas y culturas. Fomenta la tolerancia", relata. También contactaron con gente de Canarias o León. La palabra sinónimo de paz enviada desde O Piñeiriño fue "sintonía".