Como una patena quedó ayer la playa de A Sapeira gracias a la segunda jornada intensiva que empleaton las mujeres de A Illa para retirar toneladas de algas acumuladas este invierno en el fondo marino.

Gracias a ello, las 62 mariscadoras con permiso podrán ir hoy a recoger la almeja que queda viva "porque la mortandad ha sido muy elevada".

Hoy es el único día que les queda de trabajo en esta playa porque la marea ya no se lo vuelve a permitir hasta dentro de unos quince días, explica Sita Castro, una de las mujeres que pasó el fin de semana con las tareas de limpieza. "Nos conformamos con que cada mujer saque un kilo de almeja", añade.

A partir de mañana, las mariscadoras acudirán a otras zonas productivas de A Illa, menos afectadas por las algas. En concreto a partir del martes cuentan con estar en As Aceñas y Camaxe y más adelante también en Riasón y otras del entorno, pero que son menos productivas.

Con todo, son conscientes de que el problema del sargazo persiste en las zonas productivas de A Illa por lo que se dirigirán a la Consellería de Mar para que les ceda alguna red de bou, con lo que la actividad se simplificaría de forma considerable.

Ayer bajaron a la playa de A Sapeira menos mujeres que el sábado. "Seríamos unas sesenta las que trabajamos durante unas tres horas para dejar todo limpio. Nos quedó una pequeña esquina en Punta Aguillón", explica Castro.

Las mujeres afirman que se trataba de una actividad urgente. "Teníamos que retirar todas esas algas porque sino en la próxima marea no encontraríamos ni un solo molusco vivo", sostienen.

La enorme cantidad de "leituga" en A Sapeira cubría completamente la zona productiva por lo que impide la oxigenación del marisco. "Ya hay muchísimas conchas vacías", explica.