La directiva de la agrupación de mariscadoras a pie de Vilanova llamó ayer a los vigilantes de la Xunta de Galicia para denunciar que tres mariscadores a flote de la misma localidad estaban faenando dentro de la concesión de las mujeres. Los inspectores acudieron a la zona y abrieron un expediente a los afectados. El conflicto se produjo en O Castelete (San Miguel) y según la presidenta de la agrupación, Dora Nogueira "hay rañeiros que llevan entrando en nuestra zona de trabajo desde la semana pasada". Al parecer, en la zona no hay boyas para separar las concesiones "pero todos sabemos donde están los límites".

El hecho provocó una agria discusión entre mujeres y hombres. Dora Nogueira apunta al respecto que "son conflictos que no tiene por qué haber porque estamos todos dentro de la misma cofradía", y que dejan muy mal sabor de boca "porque da la impresión de que ya no te puedes fiar ni de los compañeros". Además, apunta que cuando se dio el primer caso "llamamos a la cofradía, pero nos dijeron que no podían ir porque la lancha estaba averiada".

Entre tanto, la patrona mayor de Vilanova, Evangelina Lago, declaró que los tres barcos denunciados por las mujeres "entraron bastante adentro" y dice que otros rañeiros le manifestaron que "fueron allí porque parece ser que no hay marisco, y porque se trata de una zona donde no trabajan ni ellos ni nosotras".

Evangelina Lago no disculpa la actitud de los mariscadores expedientados "porque está mal lo que hicieron", pero entiende que tampoco obraron correctamente las mujeres "porque hablando se solucionan los problemas y no me parece correcto que entremos en una guerra hombres y mujeres de una misma cofradía".

Además, manifiesta que no tenía constancia del conflicto de la semana pasada, y reconoce que hubo una avería en la lancha del pósito y que la cedida por la Xunta no se puede usar en todas las secas por su calado.