"El furtivismo marino y su incidencia en la Comunidad Autónoma de Galicia" es el título de un ambicioso informe, y de un libro elaborado con todos los datos obtenidos, mediante el cual se intenta sentar las bases para acabar con esta lacra que tantos perjuicios causa. Presentado este verano, el trabajo está definitivamente cerrado, y solo falta que la Consellería do Mar, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, Fiscalía, cofradías de pescadores, Gardacostas de Galicia y demás implicados en la lucha contra el furtivismo sigan avanzando de manera coordinada para hacer frente a esta lacra.

Para todos ellos será de vital importancia tipificar el furtivismo como delito, y aunque esto entraña numerosas dificultades, como bien se apunta en el libro que dirigen los tenientes coronel Eduardo Isidro Martínez y Miguel González Arias, es posible avanzar legislativa y judicialmente en aspectos concretos.

La conselleira de Mar, Rosa Quintana, aplaude el informe encargado por la Fiscalía Superior de Galicia y lo comparte, incidiendo en que este trabajo permitirá conocer mejor tanto el furtivismo como al furtivo, pero también todas las actividades ilícitas relacionadas.

Y fruto de ese mejor conocimiento de la situación en el litoral gallego será posible "reforzar los medios para combatir la ilegalidad y abrir nuevos caminos hacia la tipificación del furtivismo como delito, lo que sin duda supondrá un avance determinante para su erradicación".

En este sentido, en la reflexión que incorpora al libro "El furtivismo marino (...)", Rosa Quintana destaca que en el apartado de conclusiones del mismo se recogen propuestas concretas e importantes, como por ejemplo "abrir una vía para sancionar penalmente conductas que potencialmente pudieran ser peligrosas para la sociedad, como la captura ilícita de productos no aptos para el consumo en zonas vedadas o restringidas". O lo que es lo mismo, se plantea perseguir y castigar con dureza la venta de especies que puedan estar afectadas por las biotoxinas y sean extraídas a pesar de las prohibiciones.

Otra de las líneas a seguir marca el camino hacia la imputación penal de los furtivos por las acciones contra el patrimonio, "cuando se extrae marisco en zonas delimitadas por concesiones administrativas", es decir, cuando los ilegales actúan en los bancos marisqueros de las cofradías y agrupaciones de mariscadoras.

Y un tercer eje sobre el que hacer girar la tipificación de la actividad delictiva es el que se refiere a la estafa cometida, que es como puede entenderse la comercialización de capturas ilícitas aparentando que no lo son.

Así pues, la conselleira Rosa Quintana, que incide en que la lucha contra el furtivismo ha sido uno de sus objetivos prioritarios desde la constitución de su departamento en abril de 2009, cree iniciado un importante camino que ahora se ve reforzado con este informe, en el cual se deja claro que "la Fiscalía debe jugar un papel imprescindible" en la lucha contra los ilegales.

Como crucial considera "la actitud del consumidor a la hora de rechazar productos de dudosa procedencia", para lo cual juegan un papel decisivo los pasos que la propia Administración pueda dar en la mejora de la trazabilidad, "para ofrecer con todas las garantías los productos del mar al consumidor".

Así pues, a la espera de concretar la tipificación como delito del furtivismo o alguna de sus vertientes, es momento de cerrar filas para ponerle freno, y esta lucha "no es una competencia exclusiva de la Administración autonómica, sino que requiere del concurso de otras Administraciones, como la del Estado, con la participación de las fuerzas de seguridad; la de la Justicia, a través de la Fiscalía; la del propio sector, con un compromiso decidido de los profesionales del mar que extreme su colaboración; y la de los ciudadanos en su condición de consumidores, para no ser cómplices inconscientes de estas prácticas ilegales", resalta Rosa Quintana. Lo hace desde el convencimiento de que "la actividad furtiva ha disminuido en los dos últimos años, pero los objetivos no se han alcanzado aún y es preciso seguir trabajando para lograr una actividad extractiva ejemplar que permita la sostenibilidad de los recursos y que día a día mejore la calidad de vida de los profesionales del mar".