Más de mil escolares se dieron cita ayer en Vilagarcía para dar un impulso al idioma gallego. Alumnos de quince centros de la comarca se desplazaron hasta la capital arousana para participar en el Correlingua, multitudinaria carrera que cada año por estas fechas trata de recordar a los niños el valor de su lengua.

Estudiantes de educación infantil, primaria, secundaria y especial se armaron de ropa y calzado deportivo para disfrutar de una actividad que conjuga a la perfección deporte y cultura.

Pasaban de las diez de la mañana cuando los alumnos comenzaron a recorrer el itinerario que los llevó desde el Parque de Miguel Hernández hasta la playa de Compostela; itinerario que, después de varias ediciones pasadas por agua, gozó de unas condiciones meteorológicas inmejorables.

La que no goza de tan buena suerte es, precisamente, la lengua gallega. Y es que, pese a la multitudinaria convocatoria de ayer, cada vez son menos los jóvenes que usan este idioma en su día a día. Docentes de diversos centros educativos de O Salnés ratifican una tendencia que es palpable a pie de calle, y que no augura un futuro nada halagüeño para el gallego.

Francisco Abuín es profesor de primaria en el vilagarciano colegio de A Lomba, y asegura que sus alumnos emplean el idioma de Galicia "mucho menos de lo que deberían". "Parece que tienen a menos hablar gallego, y no hay por qué", indica el docente, convencido de que cada vez más padres se relacionan con sus hijos en castellano. A su entender este sería, junto con la influencia de los medios de comunicación, el motivo que parece estar condenando al gallego al ostracismo. "Deberíamos aprender de los catalanes, que valoran su idioma empezando por las clases altas", expone el profesor, que cree que la asimilación gallego-rural y, por tanto, gallego-paleto, todavía continúa vigente.

En el colegio cambadés de Castrelo, en el que estudian niños de entornos mayoritariamente rurales, también se percibe la creciente castellanización. Eso es lo que asegura la coordinadora de dinamización de lengua gallega del centro, Belén Treviño, que a diario contempla como los niños van dejando paulatinamente de lado su idioma.

"La mayoría de los niños hablan gallego en todas las situaciones, pero cada vez notamos una mayor tendencia a la castellanización, sobre todo al llegar a ciertas edades", expone la docente. Y es que también ella está convencida de que música, cine y medios de comunicación, así como los prejuicios vigentes, hacen que los escolares vayan dejando de lado su lengua. La misma tendencia perciben en otros centros, como el de Tremoedo o el instituto grovense Monte da Vila.

Fuera como fuere, lo cierto es que la reivindicación lingüística sirvió ayer a los estudiantes para pasar una amena jornada que contó con la actuación del grupo "Som do Galpom", con el que los niños subieron a cantar.