Las operarias de Charpo decidieron en asamblea concurrir a las subastas de bienes de los Charlín que celebre la Agencia Tributaria. La decisión, que se adoptó por unanimidad, tiene como objetivo hacerse con parte de los bienes para, en el futuro, venderlos y recuperar parte de la cantidad que se les adeuda desde que en 1991 comenzasen el conflicto laboral con la empresa de los Charlín y en 1999, ya intervenida por la Audiencia Nacional, los interventores judiciales decidiesen cerrar las puertas.

En total, las afectadas son cerca de setenta mujeres que llevan veinte años peleando por cobrar una serie de indemnizaciones que, a día de hoy, ascienden a casi dos millones de euros, tanto en concepto de salarios impagados e intereses de demora. las mujeres optaron por esta decisión tras la reunión que mantuvieron la pasada semana con responsables de la Agencia Tributaria en Galicia, en la que se les planteó esta opción y se les informó de que la subasta de bienes realizada recientemente sólo les va a reportar poco más de 450.000 euros. No será la primera vez que las trabajadoras optan por presentarse a una subasta de bienes de la familia Charlín. En 2008, las mujeres pujaron por varios bienes, entre los que destacaba la depuradora Sochar de A Illa, logrando recuperar 800.000 euros de la deuda que se mantiene con ellas. Estos 800.000 euros fueron abonados por integrantes de la familia Charlín y desató una operación del Servicio de Vigilancia Aduanera y la Policía Nacional contra el blanqueo de capitales, la Operación Repesca, en la que están imputados varios miembros de la familia, entre ellos el patriarca, Manuel Charlín.