El Auditorio de Vilagarcía fue escenario de una espléndida noche de ópera a la que pudieron asistir los vilagarcianos y vecinos de los alrededores para disfrutar de una sesión doble con “La Vida Breve” de Manuel de Falla y “Cavallería Rusticana” de Pietro Mascagni.

Se trata de una situación singular, ya que no es normal que se ofrezcan dos representaciones operísticas en un mismo evento, pero la corta duración de ambas obras representadas esta semana lo ha hecho posible siendo los cantantes, los músicos y el coro los mismos en las dos representaciones.

El aforo del Auditorio de Vilagarcía no llegó a completarse pero se estima que se llenaron en torno a 650 butacas, lo que se ha considerado un éxito tanto desde el departamento de Cultura del Concello de Vilagarcía, como de Caixanova, que organizaba la actuación, sobre todo teniendo en cuenta que la representación tuvo lugar a mitad de semana en un mes cargado de ofertas culturales.

Desamor y muerte de ópera

Ambas representaciones presentan al amor como desencadenante de deshonra y muerte.

La primera obra en ser representada fue “La Vida Breve”, un drama lírico de dos actos que aunque no es una de las obras más conocidas de su género, no deja de ser interesante, en la que Salud, una joven de familia humilde, se cree las promesas de amor de un hombre que finalmente se casa con otra chica de familia rica y niega conocer a Salud, momento en que ella muere.

Destacó en esta representación la actuación del Coro de Bailarines de Murcia y la de un cantador flamenco, que consiguieron los aplausos del público.

La segunda ópera fue “Cavallería Rusticana”, una pieza de un solo acto y poco más de una hora de duración, que de nuevo brinda un argumento donde amores no correspondidos y la defensa del honor desembocan en un duelo que acaba con la muerte de uno de los protagonistas.

La obra exigió de los cantantes una mayor capacidad interpretativa, si bien asistentes al acto reconocieron que hubo momentos mediocres en comparación con el resto de la ópera.