El monte de A Pastora es uno de los lugares preferidos por los cambadeses. Se trata de una pequeña colina arbolada situada lejos del ruido urbano, y coronada por un mirador que ofrece unas preciosas vistas sobre la localidad. Además, en su seno está la capilla de la Virgen de la Pastora, donde se celebra una de las romerías religiosas más populares del verano cambadés.

Al llegar el buen tiempo, A Pastora se convierte en un lugar muy frecuentado. Y, de algún modo, los ya tradicionales campamentos urbanos del ayuntamiento suelen ser como la primera fiesta que inaugura el reencuentro estival de muchos cambadeses con A Pastora.

El primero de los campamentos se inició ayer por la mañana. Monitores y niños –ataviados con unas vistosas camisetas y gorras de color naranja, y algunos de ellos con la cara maquillada– acudieron temprano al monte, y celebraron una primera jornada marcada por los juegos populares.

Uno de los que ayer practicaron fue el "brilé", y la treintena de niños que acudieron al campamento pasaron buena parte de la mañana lanzando la pelota, y persiguiéndola, como cuando se les escurría ladera abajo.

El campamento iniciado ayer es para los escolares de menor edad, y tendrá su continuidad la semana que viene con los estudiantes mayores. Las reuniones de A Pastora son una de las actividades infantiles más tradicionales en Cambados. La programación estival para niños se inició en realidad anteayer lunes con una excursión al parque acuático de Cerceda, en la que participaron un centenar de jóvenes cambadeses.

Otras actividades previstas para las próximas semanas son las excursiones al Club Hípico Amazonas y a la playa fluvial de Ponte Caldelas –el 23 de julio– y al Ecoparque de Marín, el 20 de agosto. Otra de las apuestas del Concello es la ludoteca, donde las familias pueden anotar a sus hijos para de este modo poder seguir trabajando con normalidad durante las vacaciones escolares. La organización de estas actividades corresponde al departamento de Cultura.