El pleno extraordinario del Concello de Vilanova aprobó ayer desestimar el recurso que la empresa Aquagest presentó a mediados de febrero contra la adjudicación provisional a Espina y Delfín del servicio de abastecimiento de agua potable.

Ese recurso amenazaba con paralizar durante unas semanas el expediente de contratación del servicio del agua, pero al ser formalmente desestimado en el pleno de ayer, el proceso se puede reanudar con normalidad.

De hecho, está previsto que a finales de este mismo mes se celebre la sesión en la que se hará oficial el nuevo contrato entre el Concello de Vilanova y Espina y Delfín. El rechazo del recurso de Aquagest fue aprobado con los votos a favor del PP, la abstención de los ediles del PSOE, y el voto en contra del BNG.

“Guerra entre empresas”

El Concello de Vilanova sacó a concurso el año pasado el servicio de abastecimiento de agua potable, y sólo se presentó una empresa, Espina y Delfín. Fue a esta firma a la que se le adjudicó provisionalmente el contrato -para los próximos treinta años- en el pleno del 25 de enero pasado. No obstante, un par de semanas después, otra importante sociedad del sector, Aquagest, presentó un recurso contra esa decisión plenaria, al entender que el expediente instruido desde el ayuntamiento adolecía de algunos errores administrativos.

En una de sus intervenciones de ayer en el pleno, el alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, se mostró molesto con Aquagest. Recuerda que ni siquiera se presentó al concurso, y que su reclamación se debía “a una guerra entre dos empresas” que podía acabar perjudicando a los vecinos del municipio.

Por ello, el pleno de ayer tenía por objeto adoptar una resolución contra el recurso de Aquagest, y poder proseguir con el trámite previsto. A la hora de tomar la palabra, el portavoz del PSOE, Rodrigo Santiago, afirmó que “en el fondo” sí comparte los argumentos de Gonzalo Durán, pero anunció que los socialistas se iban a abstener en la votación por “las formas”.

Y es que los partidos de la oposición fueron avisados del pleno de ayer -que se celebró a las 9 de la mañana- a las dos de la tarde de anteayer martes. Además, no se celebró sesión informativa alguna y los ediles de PSOE y BNG no recibieron la documentación en la que se explicaba lo que se iba a votar en el pleno hasta cinco minutos antes de que comenzase la sesión.

Debido a esa circunstancia -Rodrigo Santiago apuntó que “no tenemos conocimiento de lo que se va a votar”- los socialistas se abstuvieron. El BNG también se mostró muy contrariado por la urgencia con que se convocó el pleno extraordinario, pues el recurso de Aquagest entró en el ayuntamiento ya hace casi un mes.

La portavoz nacionalista, Carmela Alfonso, se quejó también de que no recibieron ninguna explicación previa de los contenidos del pleno de ayer. Al final, el BNG votó en contra de tumbar el recurso de Aquagest, pues entienden que la reclamación de esta empresa “corrobora” los errores que -según el Bloque- cometió el gobierno municipal en la gestión del concurso del agua, y que acabarán perjudicando a los vecinos.

En su turno de palabra, Gonzalo Durán respondió que la sesión de ayer era para realizar “un trámite pequeño por una tozudez”, y que en todo caso la oposición podrá consultar toda la documentación del concurso de cara al pleno de adjudicación definitiva, que es el día 29.

En cuanto a las acusaciones de mala gestión, replica Durán que en los ayuntamientos gobernados por el PSOE y el BNG “el agua no es más barata que en Vilanova, ni tampoco la bajan”.