El flamante presidente del Liceo Casino de Vilagarcía de Arousa, Alfonso Saavedra Lourido, desde su toma de posesión esta semana, busca la fórmula para crear un equipo directivo al tiempo que cumple con los compromisos heredados en relación con el proyecto del puerto deportivo, en el que no confía. Ayer presentó el proyecto definitivo de la iniciativa que se llevará a cabo en las dársenas 2 y 3 del Puerto de Vilagarcía a través de una UTE formada por el Liceo Casino con la empresa Incat.

"Mi obligación primordial es presentar el proyecto y cumplir con los plazos establecidos por la Autoridad Portuaria de Vilagarcía para no perder el dinero que invirtió la sociedad hasta el momento. Dar marcha atrás en esta iniciativa sería muy costoso para los socios", explicó Saavedra minutos antes de acercarse a las oficinas de la Autoridad Portuaria para cumplir con este trámite que completa el expediente de concesión de las dársenas 2 y 3.

Un mes de plazo

A partir de ahora, la Autoridad Portuaria que dirige Javier Puertas tiene un plazo de un mes para estudiar si el proyecto se ajusta a las condiciones de la concesión. Si es así, las obras del puerto deportivo, en su primera fase tendrán que comenzar, dado que para este verano deberían tenerse a disposición de los usuarios las primeras cien plazas de amarre de embarcaciones deportivas.

"Mi obligación es defender a la sociedad, siempre teniendo en cuenta a nuestro socio en la UTE, la empresa Incat. Comprendo su derecho legítimo a defender su dinero y el proyecto que yo no comparto", manifestó Alfonso Saavedra Lourido.

Este mes de plazo supone un pequeño respiro para el nuevo presidente que, en lugar de emplear las primeras jornadas de su mandato en la formación de su junta directiva, ha tenido que dedicar esfuerzos a un proyecto en el que no cree, postura que le ha llevado a asumir la presidencia de la entidad.

"Este proyecto no es el que yo quería, pero no me queda más remedio que seguir con los trámites adelante porque ya se invirtió mucho en la creación de la UTE, la compra de la nave de Alfogar y en los avales y seguros de la concesión, dinero que perderíamos si no se presenta el proyecto", puntualizó el nuevo presidente.

Saavedra explicó que ya ha encargado la realización de un plan de viabilidad sobre este proyecto, así como la iniciativa que él planteó desde el principio de acometer instalaciones sociales en otros terrenos del municipio para uso y disfrute de toda la familia. También trabaja en la revisión de todas las cuentas de la sociedad.

Su intención es reunir todos estos datos y convocar una asamblea general de socios para que sean ellos los que decidan si continúan o no con el proyecto de las instalaciones del Liceo Casino en el nuevo Puerto Deportivo.

Varias alternativas

Este mismo proyecto tiene varias alternativas. La idea más ambiciosa defendida por el anterior presidente, Álvaro Paz, es el mantenimiento de la unión temporal de empresas con Incat y participar en la construcción y explotación del puerto deportivo, dado que los beneficios de esta actividad repercutirían en un 60% en el Liceo Casino. Este dinero sería empleado para la financiación de las obras de la sede social de la entidad en el recinto portuario.

Otra de las opciones es que esta sociedad vilagarciana ceda su participación en la UTE a la inversión privada, formalizando un convenio para quedarse en exclusiva con el espacio destinado para la construcción de la sede social.

Las instalaciones exclusivas para el Liceo Casino en el recinto portuario incluirían, según el proyecto presentado ayer en la Autoridad Portuaria, un aparcamiento en semisótano con capacidad para unas 125 plazas, sobre el que iría construido el edificio social.

En él se diseña un pabellón polideportivo y unas dependencias de tipo social multiusos, además de una piscina climatizada con SPA y gimnasio. También contará con cafetería y restaurante, así como otra cafetería abierta al público. En el proyecto definitivo se ha tenido que renunciar a la pista de pádel para encajar la obra teniendo en cuenta la existencia de la nave del astillero, a la que se le da cabida.

Saavedra proponía buscar unos terrenos en otro punto de Vilagarcía para hacer unas instalaciones algo más modestas y con menor coste para los socios del Liceo Casino, aunque esta opción está condicionada a la búsqueda de soluciones para salir airosos del proyecto portuario.

"Lo que sí es cierto es que la sociedad, sin crear nuevas instalaciones, estaría abocada a la desaparición en unos años. Tenemos que ofertar cosas nuevas y atractivas para los socios y captar a la gente de 25 a 45 años para que se haga socia del Liceo Casino. Necesitamos más masa social", expuso ayer Alfonso Saavedra.

Nombramiento

El nuevo presidente aún no ha nombrado a todos los cargos que le acompañarán en su junta directiva. De momento, según explicó, trabaja con un equipo de colaboradores que le asesoran en las primeras actuaciones al frente de la sociedad.

Ayer formalizó ante notario el primero de los nombramientos, oficializando el cargo del secretario del Liceo Casino de Vilagarcía que recayó en el abogado vilagarciano Fernando García Giménez, hermano de la alcaldesa de Vilagarcía de Arousa, quien ocupa también la secretaría del patronato de la Fundación de Fexdega.