M. G.  Vilagarcía

La empresa encargada de ejecutar las obras de la variante del Eje Atlántico de Alta Velocidad Ferroviaria, en el tramo de Vilagarcía y Catoira ha comenzado los trabajos de desbroce del terreno en la zona de Trabanca Sardiñeira, localidad vilagarciana desde la que parte el primero y más importante de los túneles diseñados para este trayecto.

Son en total 313.000 metros cuadrados de terrenos afectados por el nuevo trazado ferroviario para el paso del tren de alta velocidad de los que 201.573 metros cuadrados están ubicados en Vilagarcía de Arousa y 111.741 metros cuadrados en el municipio de Catoira.

Las obras del tren de alta velocidad han sido adjudicadas a una unión temporal de empresas, UTE, compuesta por la contratista Acciona Infraestructuras SA y Obras Subterráneas SA por un total de 126.436.774,41 euros.

Las actuaciones incluyen la remodelación de la playa de vías y de la zona de andenes de la estación de Vilagarcía de Arousa, con la modificación de la cabecera de la estación del lado de Santiago, así como el ramal de enlace del Puerto. En esta estación también está prevista la ejecución de un paso inferior para dar acceso a los vecinos de las zonas próximas.

Pero las obras comienzan a la altura de la antigua estación de Carril, en terrenos de los antiguos talleres de Renfe, punto desde el cual se construirá un túnel para desviar las vías del tren de las zonas urbanas de Trabanca Sardiñeira y de Carril, alejándolas de la costa a la altura de la parroquia de Bamio, ya que pasarán soterradas por el monte Xiabre.

Las características del subtramo Vilagarcía-Catoira, que abarca desde la estación hasta el río Ulla, donde se acometerá un nuevo viaducto, incluyen una plataforma de doble vía preparada para la ejecución posterior de la superestructura y las instalaciones de seguridad y electrificación, estando prevista también la utilización de traviesas polivalentes para realizar después el cambio de ancho ibérico al U.I.C.

Tres años de obras

En este proyecto, que tiene un plazo de ejecución de tres años, destacan como obras singulares los túneles de Quinteiro, con 1.970 metros de longitud; Valicobas, con 1.335 metros; Abalo, con 625 metros y el túnel artificial de Outeiro, con 560 metros de longitud, todos ellos para vía doble con 85 metros cuadrados de sección mínima interior, disponiendo túneles artificiales en las boquillas para la integración ambiental de las mismas.

También se proyecta un paso superior y cuatro inferiores que permiten la reposición de la red viaria atravesada por el ferrocarril.