AROSA 4 - 2 MONTAÑEROS
Arosa
Moncho, Jonathan (Alberto, m. 92), Jesús, Valiñas, Santos, Miguel, Luis Alberto (Chiño, m. 51), Manu Rodríguez, Hugo (Dani Conde, m. 85), Padín y Fernando.
Montañeros
Vila, César (Moreira, m. 75), Raúl, Álex Canedo, Rochela, Héctor (Madrigal, m. 75), Olaiz, Rodri, Rivera, Pesco y Luis Ángel (Añón, m. 65).
Goles: 1-0, m. 16: Hugo; 1-1, m. 37: Rivera;_2-1, m. 53: Fernando; 3-1, m. 71: Chiño;_3-2, m. 91: Moreira;_4-2, m. 94: Padín. Árbitro: Comesaña Bastero (Vigo), auxiliado por Díaz y Barciela. Amonestó por los locales a Jonathan, Jesús y Santos. Por los visitantes a Álex Canedo, Héctor, Olaiz y Pesco. Incidencias: Décima jornada. Alrededor de 400 espectadores en A Lomba. El mal funcionamiento de las torres de iluminación dejaron en penumbra el terreno de juego durante muchos minutos.
diego doval Vilagarcía
El Arosa dejó muy claro ante el Montañeros que su fútbol no tiene nada que envidiar a ningún equipo de la categoría. Los coruñeses, que llegaron a A Lomba vestidos con el traje de líder, acabaron mostrando sus verguenzas ante la superioridad de la que hicieron gala los de Juan Laxes.
La dupla formada por Hugo y Luis Alberto generó la primera de las muchas situaciones de peligro para la portería del Montañeros defendida por el vilagarciano Alejandro Vila, al que Luis Alberto no acertó a superar en un mano a mano.
Un remate errado de cabeza de un incisivo Hugo se convirtió en el preludio del gol del delantero, que acertó al anticiparse a los centrales tras un servicio de Fernando desde la derecha.
El 1-0 era escaso para los merecimientos de unos y otros. Un omnipresente Hugo gozó de dos ocasiones más suficientemente claras como para aumentar la diferencia.
Sin embargo, fue el Montañeros el que empató en su único tiro a puerta de la primera parte en una genial acción de Rivera tras un control de espuela.
En la reanudación el Arosa siguió en la misma línea. Hugo porfiaba, pero seguía peleado con el gol y el 2-1 llegó en una discutida acción en la que, tras remate de Fernando, el Montañeros protestó airadamente el que la pelota hubiese rebasado la línea.
El equipo vilagarciano seguía fluido, aspecto al que contribuyó la entrada de Chiño, autor del tercer tanto, que no celebró.
Los visitantes tiraron de orgullo y redujeron distancias en el descuento del encuentro, pero Padín en una genial acción materializó un contragolpe para apuntillar.
