La Comisión Ciudadana de Afectados por Megasa denunció ayer que la fábrica volvió a emitir a la atmósfera sustancias tóxicas durante la jornada del pasado lunes, día 21 de julio. El colectivo que dirige Xabier Ríos asegura que la situación era claramente perceptible para los vecinos, debido al fuerte olor y a que algunos tenían problemas para respirar, por lo que se pusieron en contacto con la delegación provincial de la Consellería de Medio Ambiente.

Según la versión de los vecinos, desde la Xunta de Galicia contactaron con la fábrica, y en ésta les contestaron que en efecto se habían producido emisiones contaminantes, justificándolas en una avería puntual del incinerador, que actúa como un filtro de emisiones. Pero esta explicación no ha convencido a los vecinos de la comisión, que llevan luchando desde hace más de un año por el traslado de la fábrica a un polígono industrial, pues en la actualidad se encuentra en pleno barrio de As Carolinas, rodeada de edificios de viviendas.

Para los vecinos, lo sucedido hace una semana demuestra que Megasa carece de un sistema de seguridad que garantice la limpieza de sus emisiones, pues entienden que la fábrica debería contar con un dispositivo que las filtrase aún en caso de que se averiase el incinerador. La comisión que preside Xabier Ríos alega también que los vecinos están preocupados ante la posibilidad de que un fallo de seguridad cause un incendio, una explosión en el almacén de materiales peligrosos o un vertido, y que eso resultaría muy grave debido a la presencia de los edificios de viviendas en la zona.

La comisión de afectados hizo ayer de nuevo un llamamiento a la Consellería de Medio Ambiente para que no se le conceda la Autorización Ambiental Integrada a Megasa -se trata de un permiso que la Unión Europea exige ahora para permitir la continuidad de la actividad fabril- "y se plantee su traslado a un polígono industrial, alejando de una vez por todas el elevado riesgo de una catástrofe medioambiental y de salud público del casco urbano de Vilagarcía", apuntó Ríos.

Para dejar constancia documental de las supuestas emisiones tóxicas del pasado día 21 la comisión de afectados también puso una denuncia en las dependencias del Seprona de la Guardia Civil.

Irregularidades urbanísticas en las instalaciones

Esta misma semana trascendió que el Concello de Vilagarcía ha remitido un informe demoledor a la Consellería de Medio Ambiente, en el que se apuntan varias razones que justificarían el traslado de la fábrica fuera del casco urbano. En primer lugar, los técnicos municipales señalan que la parcela donde se ubica Megasa necesitaría un estudio de detalle urbanístico para que se permitiese cualquier tipo de obra de reforma, y que no lo tiene. Además, según el Concello, a día de hoy la empresa no tiene licencia municipal para la actividad que está desarrollando, y que consiste en la fabricación de envases metálicos.

Otro de los puntos del informe municipales señala que algunas construcciones aledañas a la principales están sometidas a un expediente de infracción urbanística, con lo cual podrían tener que ser demolidas en el futuro. Es más, según los técnicos del ayuntamiento de Vilagarcía ya será imposible legalizar una de las naves que forman parte del complejo fabril.

Por ello, el Concello coincide con los vecinos y con varios colectivos ecologistas en que lo más sensato es trasladar Megasa a un polígono.