Los registros de precipitaciones que acumula el presente mes de marzo no tienen precedentes en más de dos años y va camino de convertirse en uno de los más lluviosos de los últimos tiempos, después de un largo periodo de sequía.

En estos 23 días ya transcurridos del mes se acumulan más de 250 litros por metro cuadrado, a una media de unos quince litros por jornada y solo se llegó a un registro cero los días 20 y 21, es decir, el martes y el miércoles pasado.

Ayer se superaron los 25 litros en la estación de Meteogalicia en Campolongo y no fue la jornada más lluviosa. Por el momento destacan los días 1 y 14, con más de cuarenta litros, barrera que se rozó los días 9 y 10. En todos los casos coincidió con alguno de los temporales del mes.

Estas cifras cobran mayor relevancia si se comparan con la escasez de precipitaciones del pasado año, cuando ninguno de sus meses llegó a los 300 litros en total y en todo el ejercicio apenas se superaron los mil litros.

Desde diciembre, la lluvia ha estado presente en la vida diaria de los pontevedreses y su abundancia ha tenido consecuencias directas en las reservas de agua, espantando por completo y por el momento, el fantasma de la sequía. El río Lérez registraba ayer un caudal medio de 35 metros cúbicos por segundo y el embalse del Pontillón sigue al 100% de ocupación, al igual que el de Eiras, entre Ponte Caldelas y Fornelos. El del Umia se sitúa en el 75% y el de O Con, que abastece a Vilagarcía, roza el 90%.