No, no es excusa el puesto de trabajo para cambiar el horario de un pleno, como sucede en Moaña. La Constitución Española obliga a las empresas a dejar tiempo para que los ediles puedan acudir a los plenos. El argumento, ese, no tiene peso. Y si alguien tiene problemas en el trabajo por culpa de tener que pedir permiso para asistir a los plenos, que lo diga, porque esa empresa está incumpliendo la ley. Y no es de recibo poner un pleno a las 22.30 horas. Ya cuando empiezan a las 20.00 horas finaliza pasadas la 24.'00 horas. El miércoles habrá que llevar tienda de campaña.
Saltar la ordenanza de ornato
En Cangas, el gobierno se salta la ordenanza de ornato y pega carteles de prohibido aparcar en las farolas. Los socialistas lo descubrieron.