El piragüista español Saúl Craviotto ha asegurado que el oro conseguido en K2 200 junto al gallego Cristian Toro "sabe a gloria", ya que es lo máximo a lo que se puede aspirar, y que está "muy orgulloso" del gallego y del trabajo realizado para poder llegar a ser campeones olímpicos en los Juegos Olímpicos de Río, además de avisar que han despertado "a la bestia" de cara al K-1 200, prueba que da comienzo este viernes.

"Esta medalla me sabe a gloria, es lo más grande a lo que se puede aspirar. Estoy muy orgullosos del trabajo que hemos hecho, de mi compañero, que no me ha fallado nunca en los últimos meses, de mi entrenador, de mi familia y de toda la gente que nos ha apoyado. Ahora mismo estoy en una nube y muy feliz", aseguró el policía nacional en declaraciones a RTVE.

Junto a Cristian Toro, Craviotto se proclamó este jueves campeón olímpicos de K-2 200 en Río, después de remontar e imponerse con solvencia en la final disputada en la laguna Rodrigo de Freitas.

Este mismo viernes competirá en la prueba de K1 200. "Ahora voy sin tanta presión, más relajado. Se compite diferente sabiendo que acabas de ganar un oro y ahora voy a disfrutar. Estoy fuerte también en K1, pero sé que va a estar muy reñido", explicó. "Han despertado a la bestia. El año pasado fallé y me quedé fuera de la final, pero eso me hizo espabilar. Cuando se cometen fallos a veces es bueno, porque te hacen recapacitar, empezar de cero y ese fallo me vino muy bien, porque estoy cabreado y voy a por todo", concluyó.