Seis meses de prisión. Esta es la condena impuesta por el Juzgado de Violencia de Vigo a J.F.F.F, de 38 años y residente en Muros, tras admitir que incumplió dos días seguidos en julio la medida cautelar -dictada por un tribunal de Santiago- que le impide comunicarse con su exnovia.

El miércoles 26 de julio, la Policía Local lo localizó en un banco al lado del centro de acogida en el que se encontraba la víctima. Ambos ya habían estado juntos en una cafetería. Fue arrestado y pasó a disposición judicial, decretándose su libertad aunque investigado por incumplir el alejamiento. Al mediodía salía del juzgado y poco después se producía un nuevo quebrantamiento, por lo que fue apresado. La juez de Violencia le envió a prisión, pero poco después se alcanzó un acuerdo de conformidad por el que se acumulan ambos quebrantamientos y se impone la pena de 6 meses de cárcel.