El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, levantó ayer una nueva polémica, en esta ocasión en Reino Unido, al sugerir que el aumento del número de delitos que se registró en el país el último año se debe al "islam radical".

Una vez más, Trump utilizó Twitter para dar una de sus polémicas opiniones. "Noticia de última hora: 'Los crímenes en el Reino Unido aumentan un 13% en un año en medio de la propagación del terror del islam radical'. No es bueno. ¡Debemos mantener Estados Unidos a salvo!", escribió.

La Oficina Nacional de Estadísticas británica (ONS), había informado de que los delitos con violencia aumentaron en Inglaterra y Gales un 19% en los doce meses anteriores a junio, mientras que el número total de delitos en esas dos regiones ascendió un 13 %. Según sus datos, de los 664 homicidios cometidos en esos doce meses, solo 35 fueron causados por los tres atentados islamistas con víctimas que sufrieron Londres y Manchester en ese periodo. La ONS matizó que el incremento de la criminalidad se explica por el alza en el 26% de los crímenes con arma blanca y un 19% en los asaltos sexuales.

La diputada de la oposición laborista Yvette Cooper, presidenta del comité de Interior del Parlamento británico, acusó a Trump de fomentar el odio con comentarios "ignorantes". "Es asombroso que hayamos llegado a un punto en el que declaraciones inflamatorias e ignorantes por parte del presidente de Estados Unidos se ven como algo normal", dijo Cooper.

Por otro lado, el Senado de Estados Unidos aprobó ayer un presupuesto de cuatro billones de dólares para el año fiscal 2018, lo que anticipa la ansiada reforma fiscal que promueve Trump. La propuesta de los republicanos salió adelante por la mínima, con 51 votos a favor y 49 en contra, y con la oposición del senador ultraconservador Rand Paul, que criticó un gasto demasiado elevado en las cuentas.

Junto al presupuesto, los republicanos aprobaron enmiendas que permitirán conciliar su propuesta con la ya aprobada en la Cámara Baja, que incluía 622.000 millones de dólares para Defensa. También aprobaron otra enmienda que permitirá aprobar la futura reforma fiscal con una mayoría simple de 51 votos, en lugar de los habituales 60 requeridos.