El jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas francesas, el general Pierre de Villiers, dimitió ayer en protesta por los recortes anunciados por Emmanuel Macron en Defensa para que el déficit no exceda del 3% del PIB. El presidente y De Villiers han mantenido en la última semana un enfrentamiento bien visible que detonó cuando el general, después de comparecer ante la comisión de Defensa de la Asamblea Nacional, el pasado día 12, advirtió que no tenía intención de que le "jodieran una vez más".

La dimisión de De Villiers no tiene precedentes en la V República, fundada en 1958, así que Macron se apresuró a nombrar un sustituto en menos de tres horas. Se trata de François Lecointre, de 55 años y hasta ahora jefe del gabinete militar del primer ministro, Edouard Philippe, cargo que ocupa desde que Manuel Valls le nombró en 2016.

De Villiers justificó su renuncia en una nota en la que expone que con la reducción de fondos no se siente capaz de mantener "el modelo de Ejército en el que cree para garantizar la protección de Francia y los franceses, hoy y mañana, y apoyar las ambiciones de nuestro país".

El Ministerio de Defensa recibirá este año 850 millones menos. El recorte en el estamento militar forma parte de un ajuste presupuestario general de 4.500 millones que Macron ya había anunciado para mantener el déficit por debajo del 3%.

En la citada comisión de Defensa de la Asamblea Nacional, celebrada a puerta cerrada pero filtrada por algunos diputados, De Villiers protestó airadamente contra el recorte. "Es insostenible", advirtió en esa ocasión.

Dos días después, en la celebración de los actos de la Fiesta del 14 de Julio, Macron le llamó al orden, si bien sin citarle, al considerar "indigna" la apertura de un debate público sobre el presupuesto militar.

"Soy vuestro jefe, sé cumplir los compromisos que he asumido ante nuestros ciudadanos y ante nuestro Ejército, y no necesito ninguna presión ni ningún comentario", dijo también Macron.

El portavoz del Gobierno, Christophe Castaner, destacó la "experiencia de combate" de Lecointre, "algo que en el periodo actual es especialmente importante para nosotros", y la oposición, a derecha e izquierda, aprovechó para criticar a Macron y reprocharle que recorte los fondos para el Ejército en un momento en el que el país afronta numerosos desafíos tanto en el interior como en el exterior.