Perú celebró ayer la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, en las que se dirime el regreso al poder de la familia Fujimori, en la persona de Keiko Fujimori, hija del exdictador Alberto Fujimori y primera dama tras la separación de sus padres. Keiko Fujimori se enfrentó al economista y exministro Pedro Pablo Kuczynski, al que en la primera vuelta del pasado 10 de abril se impuso con un 39,85 por ciento de las papeleta, por un 20,99% de su rival. Los primeros avances de resultados no se esperaban hasta mediada la pasada madrugada.
Ambos candidatos participaron en el tradicional desayuno electoral y posteriormente se dirigieron a votar. Antes de depositar su papeleta, Fujimori dijo que ayer era "un día muy especial" y llamó a los ciudadanos a que "vayan a votar sin miedo y pensando en el país porque es un día de fiesta". Por su parte, Kuczynski pidió votar a "conciencia y con alegría por la democracia", ya que, añadió, hay que pensar que "la democracia y el diálogo es lo único que nos va a salvar del narcotráfico y la corrupción".
