Seis mujeres murieron ayer en Yemen por bombardeos aéreos de la coalición árabe liderada por Arabia Saudí, registrados antes de que la alianza anunciara el fin de una tregua que ningún bando respetó.

Este bombardeo, que causó heridas a una séptima mujer, tuvo lugar en la provincia de Saada, en el noroeste del Yemen y feudo de los rebeldes hutíes, según la agencia de noticias yemení Saba, controlada por los insurgentes.

La fuente denunció seis bombardeos, que causaron grandes destrozos en propiedades públicas y privadas, efectuados antes del fin del alto el fuego a las 14.00 hora local.

En la periferia de la capital Saná, la aviación de la coalición bombardeó también en cinco ocasiones la zona de Haima, donde se ubican sedes gubernamentales controladas por los hutíes.

También efectuó tres bombardeos contra un campamento en la montaña de Al Nabi Shueib, al noroeste de Saná, y destruyó una fábrica alimenticia en la zona de Dahmar, según fuentes tribales y testigos consultados.

El anuncio de la coalición árabe, que comenzó su intervención en el Yemen contra los hutíes en marzo pasado, sorprendió porque en ningún momento hubo un cese de los bombardeos.

La tregua empezó el 15 de diciembre con las negociaciones de paz en Suiza entre ambos bandos y, después de una semana, se amplió automáticamente, pese a que ni los hutíes ni sus rivales la respetaron.