La tensión aumentó ayer en Israel y Palestina con cuatro apuñalamientos de palestinos a israelíes y con la continuación de disturbios en Cisjordania y Jerusalén Este. Seis personas resultaron heridas, tres de ellas de gravedad, en los cuatro ataques con arma blanca, que se saldaron con uno de los agresores muerto, abatido por un soldado, y dos de los atacantes detenidos. Además, también murió un palestino en enfrentamientos con soldados en el territorio palestino ocupado de Jerusalén Este.

Entre tanto, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, prohibió a todos sus ministros y parlamentarios visitar la Explanada de las Mezquitas, una medida destinada a evitar nuevas tensiones y enfrentamientos. La prohibición se extiende también a los parlamentarios árabes.