El partido Fidesz-Unión Cívica Húngara del primer ministro Viktor Orbán revalidó su mayoría absoluta en las elecciones legislativas de ayer, según los sondeos a pie de urna, que pronostican que obtendrá aproximadamente un 48% de los votos, lo que se traduciría en el control de 133 de los 199 escaños del Parlamento y una nueva mayoría cualificada de dos tercios.

En concreto, el sondeo del Instituto Nezopont pronostica un 48% para Fidesz, un 27% para la coalición Unidad (que reúne a cinco partidos de centro-izquierda y centro), un 18% para el partido ultraderechista Jobbik y un 6% para el partido ecologista LMP.

El portal index.hu plantea una proyección de 133 escaños para Fidesz, 40 para Unidad, 21 para Jobbik y 5 para LMP, mientras que el estudio del Instituto Szazadveg augura entre el 47% y el 51% de los votos para Fidesz, entre el 19% y el 23% para Unidad, entre el 18% y el 22% para Jobbik y entre el 3% y el 7% para LMP.

En cuanto a la participación, la Oficina Nacional de Elecciones húngara informó de que a las 17.30 horas, hora y media antes del cierre de los colegios, la participación era del 56,8%, por debajo del 59,3% registrado a esta misma hora en las elecciones de 2010.

Uno de los primeros en votar fue precisamente el primer ministro Orbán, quien hizo un llamamiento a la participación desde su colegio electoral de Budapest. "Espero que mucha gente acuda para que cualquier gobierno que se forme cuente con un gran apoyo popular y pueda así ponerse a trabajar de inmediato", dijo.

Estas son las primeras elecciones celebradas según la ley electoral de 2013, aprobada gracias a la mayoría absoluta de Fidesz y que reduce el número de diputados de los 386 actuales a 199 y modifica las circunscripciones para facilitar la victoria de Orbán, según la oposición.