La Asamblea Nacional Popular (ANP), el Legislativo chino, nombró ayer nuevo primer ministro a Li Keqiang, de 57 años, quien, como sucesor del saliente Wen Jiabao, hereda la tarea de enderezar la segunda economía del mundo.

Li, que desde 2008 era el viceprimer ministro encargado de asuntos financieros, fue elegido por los casi 3.000 delegados en una votación cuyo resultado se conocía ya con meses de antelación -desde que en noviembre pasara a ser "número dos" del Partido Comunista- por 2.940 votos a favor, tres en contra y seis abstenciones.

El nuevo primer ministro, llamado en principio a encabezar el Gabinete nacional durante 10 años, es un político que combina unos humildes orígenes rurales con unas tendencias liberales que ya mostró durante su lustro como viceprimer ministro económico. Su función será ocuparse del "día a día" del país, frente al puesto más ideológico del presidente, que desde el jueves es Xi Jinping.