Los piratas somalíes retienen, tras la captura en los últimos dos días de dos cargueros y dos pesqueros, veintiún barcos de varias nacionalidades con más de 300 tripulantes, cifra récord en los tres últimos años, pese a la creciente presión internacional sobre ellos. En las últimas horas otros cuatro barcos habían sido abordados y capturados por piratas somalíes en el golfo de Adén, dos pesqueros egipcios, con un total de 25 tripulantes, y un carguero griego, con 22 personas a bordo, y otro libanés, aunque con bandera de Togo.

El Ministerio de Exteriores egipcio confirmó ayer que las dos naves de su país habían sido asaltadas por piratas frente a las costas del norte de Somalia, aunque no precisó la fecha en la que se produjeron los abordajes, e indicó que habían iniciado las gestiones para obtener su liberación. Por su parte, Andrew Mwangura, director del Programa de Asistencia Marítima (PAM), con sede en el puerto keniano de Mombasa, confirmó ayer que el carguero griego fue abordado en el golfo de Adén, sin poder precisar la ruta que seguía la embarcación.

El 31 de marzo pasado, según la Agencia Marítima Internacional, los piratas tenían bajo su control nueve barcos y 153 tripulantes, mientras que hoy, dos semanas más tarde, los barcos en su poder son veinte y los tripulantes alrededor de 340, de ellos un centenar filipinos. En 2008, algo más de ochenta barcos fueron víctimas de los piratas somalís en la zona del Cuerno de África, mientras en 2007 lo fueron 31 y, en este periodo, llegaron a tener 17 embarcaciones secuestradas al mismo tiempo.

Este ritmo vertiginoso se ha incrementado a pesar de la creciente presencia de fuerzas navales internacionales en la zona y de las recientes acciones militares de las armadas de EE UU y Francia, que en las que han muerto cinco piratas. Tres de las muertes se produjeron en la operación realizada el pasado domingo por la Armada de EE UU para rescatar al capitán estadounidense Richard Phillips.