Las firmas textiles viguesas apuestan por el diseño y la cooperación para aguantar el envite de las importaciones orientales. Y una prueba de ello es la "ciudad del textil" que se está construyendo en el Parque Tecnológico y Logístico (PTL) de Valadares, en el que se instalarán 42 de estas empresas, y que contará con un centro tecnológico propio para avanzar en I+D+i y proyectar esta industria en el extranjero.

José Baamonde, presidente de Texvigo, asociación gestora de la "ciudad del textil", sostiene que estas empresas no tienen más remedio que cooperar para competir. "Por costes es imposible, por eso apostamos por la creación de diseño y el ahorro de costes compartiendo servicios comunes", explica.

Las primeras naves de la "ciudad del textil" se entregarán en abril de este año, después de un retraso de cinco meses en las obras al cambiar la compañía constructora -ahora es competencia de San José-, y las últimas, en julio. Según Baamonde, este retraso en las obras ha impedido a muchas firmas llevar a cabo sus programas de expansión, ya que la falta de terreno en unos casos y la lejanía en las comunicaciones en otros se lo han impedido.

"Texvigo supone un aliciente, un reto, y permitirá a las empresas penetrar más en los mercados exteriores", añade este portavoz del sector. Este proyecto permitirá a las firmas viguesas un ahorro de costes en logística, así como colaborar en proyectos comunes para la apertura de mercados internacionales. "Si la moda viguesa quiere penetrar en Noruega, resultará más fácil hacerlo en colaboración", aclara Baamonde.

La "ciudad del textil" levantó una gran expectación entre las empresas de la provincia, y muchas de ellas no pudieron acceder al proyecto por falta de espacio, formando una "lista de espera" oficiosa. En este sentido, Texvigo podría incrementar su espacio si la Zona Franca amplía finalmente el PTL de Valadares, una posibilidad que todavía se está debatiendo en el organismo estatal.