"Me siento feliz con la forma en que se desarrolló el partido.

Estaba todo el tiempo en suspense desde el lugar donde me encontraba sentado", dijo D´Antoni, entrenador de los Suns de Phoenix, que fue el que tuvo la responsabilidad de dirigir al equipo del Oeste.

D´Antoni agregó que "fue una buena experiencia estar en el Oeste.

No estoy seguro si en el otro lado pueden decir lo mismo".

Respecto de la participación de Kobe Bryant, D´Antoni dijo que "nunca consideré tener mucho tiempo en el banquillo a Bryant para ayudar a Amare Stoudemire en su intento por ser el Jugador Más Valioso (MVP)".

Stoudemire está bajo su dirección con los Suns y fue el segundo máximo encestador del partido al conseguir 29 puntos con nueve rebotes y tres asistencias.

"También hizo méritos para conseguir el premio, pero Bryant logró la última canasta con un mate espectacular y ahí estuvo la diferencia", valoró D´Antoni.

Stoudemire, que el año pasado fue baja durante la mayoría de la temporada para poderse recuperar de la microcirugía que le fue realizada en su rodilla derecha, dijo que su gran triunfo había sido el demostrar que está completamente recuperado de la lesión.

"La pasada temporada fue un año muy difícil para mi después que tener que someterme a dos operaciones, pero con un gran trabajo y dedicación he vuelto he sorprendido a muchos que pensaron que no podría ni haber llegado al partido", declaró Stoudemire. "Estar de nuevo en plenitud física es mi gran premio".

Mientras, el ambiente en el lado del equipo de la Conferencia Este era de aceptación que sus rivales habían sido muy superiores y que los dominaron de principio a fin.

"Mis predicciones se cumplieron, sin defensa, los jugadores del Oeste nos machacaron", comentó Eddie Jordan, entrenador de los Wizards de Washington, que dirigió al equipo de la Coferencia Este.

"No se puede dejar sin marca a jugadores como Kobe Bryant o Amare Stoudemire".

A pesar de la derrota y humillación, Jordan, que se convirtió en el primer entrenador del equipo de Washington el sentarse en el banquillo para un Partido de las Estrellas desde que lo hizo Dick Motta, en 1976, dijo haber vivido una experiencia única.

"Alguien puede preguntarme si me siento amargado o frustrado por la derrota, pero la respuesta es todo lo contrario, que ha sido un gran honor el poder estar en Las Vegas y dirigir al equipo de la Conferencia Este", subrayó Jordan. "Todo el fin de semana fue algo increíble y la experiencia con los mejores jugadores del mundo, inolvidable".

El alero LeBron James, de los Cavaliers de Cleveland, que con 28 puntos fue el máximo encestador para el equipo de la Conferencia Este, admitió que Bryant y los jugadores de la Conferencia Oeste fuero superiores y se merecieron la victoria.

"Esta vez no pudimos remontar la desventaja con la que nos encontramos en el marcador desde el principio y hay que darles el crédito por el triunfo, aunque luchamos para tratar que cayese de nuestro lado", comentó James.

Por parte, el comisionado de la NBA, David Stern, que después de más décadas de haber vetado a Las Vegas para que fuese el escenario de la competición del baloncesto profesional estadounidense, dijo que la ciudad se había portado de una manera ejemplar y "maravillosa".

"Le doy las gracias a todas las autoridades, a los aficionados a toda la familia de la NBA por haber hecho posible un fin de semana excepcional, en un marca perfecto para el gran espectáculo del baloncesto profesional", señalo Stern, que por primera vez concedió la celebración de un Partido de las Estrellas en una ciudad en la que no hay un equipo profesional de la NBA.