217 armadores españoles, la mayoría gallegos, faenan en 28 embarcaciones de pesca con capital nacional y bandera en el Reino Unido, según los datos de la Seguridad Social que difundió ayer el Gobierno, en una respuesta parlamentaria escrita sobre las consecuencias del Brexit (la decisión de Reino Unido de salir de Europa) para el sector pesquero. 27 de los 28 buques tienen su domicilio social en Galicia y 212 marineros proceden de alguna localidad gallega.

El Gobierno incluyó estos datos en una respuesta a la portavoz socialista de Pesca en el Congreso de los Diputados, Margarita Pérez Herraiz, y consideró difícil hacer una valoración sobre las consecuencias del Brexit. El Ejecutivo remarcó que "las buenas relaciones" entre España y el Reino Unido permitirán instrumentar "cauces adecuados" de protección de trabajadores por cuenta ajena, por cuenta propia y familiares que se desplacen dentro de sus respectivos territorios.

El Ejecutivo indicó que en 1974, antes de que España entrara en la Unión Europea, firmó un convenio con el Reino Unido sobre Seguridad Social, aunque posteriormente sus disposiciones dejaron de ser aplicables por no ser más favorables que las previstas en los reglamentos comunitarios.

La Consellería do Mar encargó un estudio tras la celebración de la consulta del Brexit para conocer las consecuencias que podría tener para los barcos de Galicia que faenan en aguas del Reino Unido y los pesqueros británicos de capital gallego. El informe, que elaboró el Instituto de Estudios Europeos Salvador de Madariaga (IESM) dependiente de la Universidade da Coruña, argumenta que esta situación justifica la revisión del criterio de estabilidad relativa que fija el reparto de cuotas entre los estados miembro de la UE.

El 15% de las cuotas pesqueras de la Unión Europea corresponden al Reino Unido desde 1983 debido a este criterio de reparto, a pesar de que solo tiene el 12% de la capacidad extractiva. España, con el 25% de capacidad pesquera, tiene adjudicadas el 7% de las cuotas disponibles desde que se adhirió a la UE, en 1986.

La secretaria xeral de Pesca, Mercedes Rodríguez, destacó en una entrevista concedida a este periódico poco después de ser nombrada en el cargo que el Brexit "no solo" va a afectar a la flota que trabaja en aguas británicas, sino que será "una ruptura total del sistema" tal y como está ahora mismo. Mercedes Rodríguez justificó su respuesta en la significativa participación de Reino Unido en el reparto de Totales Admisibles de Capturas (TAC) en los que hay lo que se llama stock corridos, que van desde el norte del Atlántico hasta aguas españolas y afectan también a stocks que tienen incidencia en aguas británicas, francesas o irlandesas. "Eso va a romper el sistema de equilibrios y todas las flotas gallegas se van a ver afectadas, no solo por el tema de acceso a aguas sino por las cuotas", concluyó.