Durante la presentación realizada ayer en el edificio de ARVI, el gerente adjunto, José Antonio Suárez-Llanos, recordó que la flota realizó un ajuste del esfuerzo pesquero muy importante desde que España entró en la Comunidad Económica Europea (CEE) en 1986. Sin embargo, solo entre 2007 y 2014 se gastaron 623 millones de euros del dinero público de la UE para desguaces de barcos, la mayoría de ellos provocados por la falta de cuotas.

Suárez-Llanos, que recordó que unas 140.000 toneladas de cuotas fueron despilfarradas cada año entre 2008 y 2014, avisa que el suyo "ha sido un trabajo que debería haber hecho la Comisión" y se pregunta por qué no se aplica el principio que usa con los permisos de pesca en terceros países, donde si estos no son usados la UE fuerza a cederlos a otro país que lo necesite.