La flota pesquera y marisquera de Galicia afronta las fechas navideñas en uno de sus peores momentos. Los diez primeros meses del ejercicio en curso permiten comprobar que las ventas en lonja han descendido respecto a años anteriores y se sitúan en niveles tan preocupantemente bajos como los registrados en 2004 y 2005.

En el sector, a pesar de todo, quieren ser optimistas. Confían en que la campaña de Navidad que se avecina -e incluso puede darse ya por iniciada- les ayude a recuperar el rumbo.

Y es que muchos consumidores han empezado a comprar ya productos susceptibles de ser congelados, que ahora son más baratos que dentro de unas semanas y pueden completar una buena mesa en las fiestas. Otros esperarán al último momento para adquirir los pescados y mariscos frescos que precisen para los banquetes navideños.

Y esto es, precisamente, lo que aguardan con ansiedad pescadores y mariscadores, pues como indican los patrones mayores consultados ayer, "ahora que lo peor de la crisis parece haber pasado, quizás la demanda de producto vuelva a aumentar y podamos salvar el año".

Pero lo cierto es que no parece tan sencillo, pues las operaciones de primera venta en los diferentes puertos gallegos durante los diez primeros meses del año se han saldado con 332 millones de euros ingresados tras la comercialización de 140.000 toneladas de producto, y esto significa una pérdida de 34 millones de euros y un descenso de 11.000 toneladas de mercancía respecto al mismo periodo de 2012.

Pero si la comparativa se extiende a años anteriores también se aprecia el considerable descenso de operaciones de primera venta. A modo de ejemplo, puede decirse que en lo que va de año se han perdido 16.000 toneladas y 48 millones de euros respecto al mismo tramo de 2011; pero también se perdieron, o dejaron de ganar, 20.000 toneladas y 35 millones de euros con relación a 2010.

Pero aún hay más ejemplos, pues entre enero y octubre de 2009 -ambos inclusive- se comercializaron en lonja 33.000 toneladas más que este año, con 9 millones de euros más que ahora; e incluso en 2008 se obtuvieron 8.000 toneladas y 36 millones de euros más que en los diez últimos meses.

Como queda dicho, para encontrar datos tan malos como los actuales hay que remontarse a años como 2005, cuando prácticamente se calcaron las cifras actuales, con 141.000 toneladas y 334 millones de euros en los diez primeros meses. En 2004 habían sido, en el mismo periodo, 126.000 toneladas y 308 millones de euros, es decir, datos incluso peores que los actuales. Lo que sucede es que en aquella ocasión -cuando aún no se hablaba de crisis- la Navidad resultó francamente buena.